miércoles, 19 de septiembre de 2012

¿Y TÚ QUÉ HACES?



Pase mucho tiempo leyendo, analizando y revisando libros religiosos de todo tipo y credos. Al concluir con todo esos libros tenía una vista de la humanidad la cual me llevo a perder la fe en ella, pero no fue por la humanidad por la que inicio todo, fue por las personas como mi padre. Aun hoy no creo en la humanidad pero si en algunas personas.

Una vez terminaba de leer los libros de un determinado credo, me enfrentaba con los que se consideraban los “guías” de ese credo. Para mi desconcierto, encontré que muchos dicen creer en deidades mencionadas en escrituras antiguas, algunos no tan antiguas, pero luego de discutir por varios minutos con ellos en tendí que no creen en la deidad; creen en las escrituras. Las recitan de memoria como si de cálculos matemáticos se tratara, y por error, en uno de mis “Encuentros” con los “guías” de los credos, me encontré con personas que a diferencia de los ya mencionados creían en la deidad y no en las escrituras. Lo curioso es que los que recitan las escrituras están convencidos que creen en la deidad y que viven a su agrado, pero aquellos que no recitan las escrituras las conocían y por ello las viven; y aunque muchas veces no hablan de ellas se puede notar que es así.

Una vez me quede con algunos de ellos y me dijeron algo que siempre tengo presente:
“No se trata de creer, mostrar, recitar, conocer.
Se trata de vivir.

Es como tener un manual en tus manos, si te lo aprendes o no, no importa porque su significado no cambiara, además es solo un libo, sin alguien que los interprete y use será basura.

Existen muchos credos y escrituras así como muchas personas que las interpretar, pero pocos las usan.”... CONTINUARA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario